La cantante evangélica Helen Berhane fue encarcelada en un contenedor métalico por más de dos años. |
ASMARA, Eritrea (ACPress.net / Protestante Digital) Helen Berhane, conocida cantante de gospel de Eritrea, fue liberada anteayer por las autoridades de su país tras haber permanecido dos años en la cárcel, brutalmente tratada, y sin que existiese cargo alguno en su contra.
Berhane, miembro de la Iglesia Evangélica Rema, que tiene unos 2.000 miembros en este país, es una de las muchos presos reivindicados por Amnistía Internacional (AI) por considerar que su detención se debe sólo al hecho de profesar una religión distinta a la de las cuatro oficialmente reconocidas en este país: Ortodoxa, Católica, la de las Iglesias luteranas y el Islam.
Según los informes en poder de esta organización de lucha en favor de los derechos humanos, las palabras que le dirigió a Berhane un oficial del ejército eritreo poco después de ser detenida y puesta en régimen de incomunicación en el campamento militar de Mai Serwa fueron que no recibiría visitas y se pudriría en la cárcel “hasta que firmara ese papel”.
“Ese papel” es un documento en el que se comprometía a abjurar de su fe y a convertirse en miembro o creyente de una de las cuatro religiones oficiales antes mencionadas.
Al negarse a firmar, Berhane fue recluida en un contenedor metálico como habitación, y era golpeada brutalmente al resistirse a renunciar a su fe.
DENUNCIA DE AI
Amnistia Internacional (AI) ya denunció en el 2005 en su informe “Eritrea: Persecución religiosa” el preocupante aumento de estas agresiones contra la libertad religiosa y los derechos humanos de los creyentes que se estaban experimentado en los últimos tres años en el país.
Según sus informes hay constancia de que al menos 44 personas han sido víctimas de detención y tortura por motivos religiosos en Eritrea.
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