LIMA, Perú (CBN News / Mundo Cristiano) El femicidio, expresión de extrema violencia contra la mujer que produce su muerte, es un crimen que se relaciona con la concepción machista de la sociedad.
“Bueno, el femicidio es un término que se construyó para identificar y caracterizar los crímenes contra mujeres por razones de género”, agregó Liz Meléndez, Socióloga del Programa de Derechos Humanos de la ONG.
En el Perú, las cifras son alarmantes. Según estadísticas estatales, entre el 2004 y julio del 2011 se han registrado un total de 851 feminicidios.
“Son mujeres generalmente jóvenes, en edad, digamos, lo que se conoce como en edad reproductiva, que están entre los 18 y los 35 de edad, cuando generalmente, las mujeres comenzamos a entablar las relaciones afectivas, terminamos, negociamos una serie de relaciones sentimentales, tenemos parejas. Entonces justo en este lapso de tiempo es donde las mujeres son más agredidas. Según las cifras, más del 73% de las víctimas fueron agredidas por personas de sus entornos cercanos como son sus esposos, sus compañeros, sus parejas, sus ex parejas, sus convivientes”, explicó Meléndez.
Con el fin de prevenir la violencia contra la mujer, en diciembre del año pasado se dictó la ley contra el femicidio en el país.
“A pocos días después de dictada esta Ley, no es que no haya habido otros casos, pero se presentó un caso, en el cual un ciudadano extranjero atentó contra su pareja, quien estaba embarazada de tres meses, y la arrojó desde un tercer piso. Nosotros hemos tomado este caso, lo hemos presentado a las autoridades, y es el primer caso de femicidio, a través de la campaña “Alto a la Violencia” que patrocina la Sociedad Bíblica Peruana. De modo que también estamos apoyando, con consejería, animando espiritualmente y también apoyándoles legalmente a la familia de la señora que falleció lamentablemente”, comentó el Dr. Roberto Miranda, abogado y director de la Sociedad Bíblica Peruana.
Este es uno de los casos, entre otros, en los que la Campaña “Alto a la Violencia” busca prevenir y apoyar a las víctimas de la violencia familiar en nuestra sociedad.
“Cada vez que se han presentado más casos, hemos animado a estas mujeres a presentar sus denuncias, para ser judicializadas, y además pueda haber una medida de intervención por parte del Estado. Hay muchos casos de violencia económica, violencia moral, violencia sicológica, que no llegan al golpe pero duelen, como si fuera un golpe físico”, detalló Miranda.
Un llamado a la comunidad cristiana es el de construir una cultura de paz en nuestros hogares e iglesias, que se difunda como ejemplo a la nación.
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