Martes 26 de Mayo del 2009
LA HABANA, Cuba (CubaMatinal.com / ACPress.net) Mientras en algunas otras áreas parece haber signos de apertura, el régimen que rige Cuba no parece estar dispuesto a dar pasos para ampliar las libertades a los evangélicos.
El Registro de Asociaciones del Consejo de Estado, ordenó cerrar una iglesia reunida en casas de la denominación evangélica “Los Misioneros de Jesús”, por calificarla de enemiga del sistema comunista.
Guillermo Prendes, pastor de esta iglesia, comentaba que llevan ocho años solicitando el permiso para trabajar legalmente en el país, pero las autoridades siempre han respondido con el silencio.
Además, ha explicado que el Registro de Asociaciones utiliza la amenaza para cerrar la iglesia en casas, advirtiendo a sus propietarios que pueden perder la vivienda si siguen con los cultos cristianos.
Pastor Manuel Morejón Soler.
CAMPAÑA PARA PEDIR LEY RELIGIOSA
Ante este y otros casos, el movimiento Alianza Cristiana de Cuba, ha iniciado en la capital una campaña de recogidas de firmas para solicitar al parlamento cubano que apruebe una nueva “Ley de Cultos y Asociación Religiosa”.
Manuel Alberto Morejón Soler, Supervisor General de Alianza Cristiana, afirma que esta campaña busca que el gobierno reconozca el derecho de todo cubano a manifestar su fe libremente.
“En nuestro país ser un cristiano honesto implica el total rechazo a las manipulaciones de las autoridades, porque si eres tu coherente con tu fe, no te puedes comprometer con el mundo de mentiras en que han sumergido a nuestro pueblo”, manifiesta el pastor Alberto Morejón.
Noticias Relacionadas:
Fidel trató de destruir la comunidad cristiana... pero hoy la iglesia está más fuerte
Con la renuncia de Fidel Castro ¿habrá más libertad religiosa en Cuba?
Botan a cristiano cubano de su centro de trabajo por predicar la Palabra de Dios
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios deben ser de acuerdo al tema de la noticia o artículo. Comentarios fuera del tema o agraviantes no serán publicadas. Escribir todo en mayúsculas se considera como gritar y además, dificulta la lectura.