Naghmeh Abedini, esposa del pastor Saeed, muestra una bandera americana que le regalaron a su esposo cuando consiguió la ciudadanía estadounidense. |
WASHINGTON, Estados Unidos (ACLJ / Protestante Digital) Durante la tarde del viernes Naghmeh Abedini, acompañada de miembros del Centro para la Ley y la Justicia en América (ACLJ), presentaron el caso del pastor Saeed Abedini y la difícil situación de los cristianos en Irán ante la Comisión de Derechos Humanos de Estados Unidos.
La presentación ante esta comisión bipartidista del Congreso es otro importante paso para que finalmente el Gobierno de los Estados Unidos tome partido con claridad en la defensa de Saeed.
La esposa del pastor Saeed, Naghmeh, expresó su decepción. “Estoy decepcionada con mi gobierno. Estoy decepcionada de que nuestro Presidente y nuestro Departamento de Estado no hayan participado plenamente en este caso. Me decepcionó ver que este gran país no está haciendo más para liberar a mi esposo, un ciudadano de los EE.UU. Sí, ambos estamos orgullosos de ser ciudadanos americanos. Y yo esperaba más de nuestro gobierno”, dijo Naghmeh ante los congresistas.
Naghmeh recordó a los presentes que Saeed recibió la ciudadanía americana con un gran orgullo y emoción en el 2010. “Estaba tan emocionado, lo anunció en las redes sociales y, poco después, una bandera le fue enviada desde la oficina del senador Carl Levin. ¡Estaba tan orgulloso!”, recuerda emocionada.
Además enfatizó el sufrimiento que su familia está pasando en esta situación. “Mi marido ha sido condenado a 8 años de prisión en el interior de Irán debido a su conversión del Islam al Cristianismo. Tenemos dos hijos, Grace Rebekka que tiene 6 años, y Ciro Jacob, que tiene 4 años. La mayoría de las noches lloran hasta quedarse dormidos, queriendo ver a papá en casa. No he tenido el corazón para decirles todavía que la pena es de 8 años. Tengo la esperanza de que no voy a tener que decirles que la sentencia es por 8 años. Tengo la esperanza de que podemos traer a casa a Saeed pronto”.
Pastor Saeed con sus hijos Grace Rebekka (6 años) y Ciro Jacob (4 años). |
Naghmeh hizo un llamado a la implicación del Gobierno. “Saeed está defendiendo la libertad religiosa en un país que no tiene respeto por los derechos humanos. ¿Vamos a estar con él? ¿Nos vamos a defender como país y proteger a un ciudadano cuyo derecho humano de la libertad religiosa ha sido tan claramente violado? No todos los estadounidenses son cristianos, pero todos - sin importar sus creencias - quiere estar tranquilos y saber que nuestro gobierno toma medidas decisivas para protegernos si alguien utiliza la fuerza para tratar de hacernos abandonar o cambiar nuestras creencias”.
Finalmente reconoció su dolor ante la ausencia de su esposo. “Saeed es un esposo y padre maravilloso. Los niños y yo le echamos de menos terriblemente. Nuestros niños se aferran a la esperanza de ver a su papá muy pronto. La verdad es que no sé si alguna vez van a hablar con él o verlo de nuevo”.
“Yo todavía no tengo el corazón para decirles que si no hacemos nada, papá nunca podrá sobrevivir a la prisión de Evin. Yo no tengo el corazón para decirles de la pena de 8 años. Espero que podamos trabajar juntos para traer a casa a Saeed”, concluyó ante los congresistas.
PIDIENDO LA IMPLICACIÓN DEL GOBIERNO
Parte de la intervención se centró en denunciar globalmente a Irán, al que desde el Centro para la Ley y la Justicia en América (ACLJ) consideran uno de los países donde más restricciones se han impuesto en los últimos años para la práctica del derecho de libertad religiosa.
“Le dije a la Comisión de que todos apreciamos los grandes esfuerzos bipartidistas del Congreso en nombre del Pastor Saeed”, explica Jordan Sekulow, del ACLJ. En total más de 100 miembros del Congreso, entre ellos 20 miembros de la Comisión, han condenado la detención ilegal de Irán de Saeed por sus creencias religiosas.
El pastor Abedini ha sido condenado a 8 años de prisión en Irán. |
“Tengo la esperanza de que la audiencia de hoy pondrá de relieve el compromiso de este caso, que muchos de ustedes han demostrado, y que el mundo escuchará que el gobierno de Estados Unidos habla con una sola voz en defensa de nuestro conciudadano, el pastor Saeed Abedini”.
Abedini está retenido en una cárcel en Teherán (Irán) tras un juicio en el que fue condenado a ocho años de prisión. Cumple pena desde el 28 de enero y, según su propio testimonio, ha sido torturado y golpeado en la cárcel, así como coaccionado reiteradamente para que se retracte de su fe.
Sekulow mostró su preocupación porque si bien “el Congreso ha dado un apoyo enorme a esta causa”, en cambio “el Departamento de Estado no parece haber dado prioridad a este caso, como ha hecho en otras ocasiones”.
Dice que Saeed Abedini se siente “abandonado” por el Gobierno, una vez que su caso ya fue público en julio del 2012 y nadie del Departamento de Estado ni de la Casa Blanca pidió su liberación hasta mediados de enero del 2013.
Destacó además que el tenso escenario internacional está sirviendo de excusa para el Gobierno, que en su opinión no está haciendo todo lo posible por liberar a Saeed. “El Departamento de Estado ni siquiera ha compartido con Naghmeh ningún detalle de lo que está haciendo para liberar a Saeed, lo que nos lleva a preguntarnos si realmente está haciendo algo”, expresó finalmente Sekulow.
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