Este es el común denominador en estos tiempos: el engaño al verdadero pueblo de Dios. Lamentablemente muchos todavía se resisten siquiera prestar atención a ello.
Por: Pr. Miguel Rosell*
“Porque se levantarán falsos ungidos, y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si fuere posible, aun a los escogidos” (Mateo 24:24).
Hace unos días un conocido mío, evangélico profesante, me dijo que le borrara de mi lista de envíos de email, porque no quería que le enviara nada que tuviera que ver con “temas doctrinales”. Este es el sentir en general en estos últimos días. Tremenda dejadez de las cosas importantes de Dios: su doctrina.
Sin doctrina sólo tenemos caos.
En aras de un presunto y mal entendido concepto del amor, una ceguera sin precedentes se ha extendido por todas partes; un aborrecimiento hacia la verdad se ha propagado como el fuego. Ya no se quiere lo verdadero, sólo el estar y sentirse bien.
Hace unos días también otro cristiano me dijo, por escrito:
“Es perfectamente correcto el discernir la falsa enseñanza y perfectamente correcto enseñar de acorde a la Palabra de Dios… sin embargo, se siente uno incómodo cuando se ha de hacer juicio contra un individuo. La otra cosa que sucede cuando reaccionamos a lo que creemos es falsa enseñanza es que podemos perder nuestro propio sentido de la paz y se sentirnos perturbados interiormente. Lo más importante es nuestra relación con Jesús y nuestro propio caminar con Dios”.
Es obvio que no es agradable defender la fe, ya que implica confrontación, y eso no agrada a nadie en primera instancia; pero en la vida hay muchas cosas desagradables, pero hay que hacerlas.
¡Claro que en cierta manera se pierde ese sentido de paz, pero esto es así porque es un sentido de paz engañoso! Mi pregunta es, cuando el Señor entró en el templo con el azote de cuerdas, etc. ¿le detuvo la pérdida de ese sentido de paz? La respuesta, obviamente es, no, porque no lo tenía: “Entonces se acordaron sus discípulos que está escrito: El celo de tu casa me consume” (Juan 2:17).
Era el celo de las cosas del Padre lo que impelió a Jesús a hacer lo que hizo.
¿Qué está pasando con nosotros los cristianos? ¿Es que somos más “buenos” que Jesús? ¿Tenemos una “paz” que Él no tenía, la cual nos impide actuar en defensa de la fe, mientras que Él (por no tenerla) hizo lo que debía? ¿En qué tipo de engaño estamos?
Pero fijémonos de nuevo en el final del escrito de ese hermanito:
“…La otra cosa que sucede cuando reaccionamos a lo que creemos es falsa enseñanza es que podemos perder nuestro propio sentido de la paz y se sentirnos perturbados interiormente. Lo más importante es nuestra relación con Jesús y nuestro propio caminar con Dios”.
Parece que la conclusión a la que llega es que la relación con Jesús es más importante que el contender por la fe… La pregunta es: ¿con qué Jesús?, pues no será con el que entró en el templo con el azote de cuerdas, deberá ser con “otro Jesús”, porque aquél Jesús nos dio ejemplo de cómo contender ardientemente por la fe una vez dada a los santos (Judas 3).
ESA FALSA PAZ NO ES MAS QUE COBARDÍA ENCUBIERTA.
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| Estos días atrás estuve enseñando estas cosas en la Conferencia de Apologética de Redwood City, CA, en la sede del Salvation Army. |
Introducción
Desde hace 15 o 20 años hasta esta parte, han ido aumentando por miles y miles los creyentes que han llegado a creer y creen, que los cristianos iremos paulatinamente estableciendo el Reino visible en esta Tierra. Es decir, que iremos tomando posiciones de gran relevancia a todo nivel en este planeta, en rabiosa pugna con la evidente y monstruosa maldad que crece desbordándose desmesuradamente por doquier. Estos cristianos profesantes creen que una vez los cristianos hayamos vencido el mal en este mundo, entonces podrá regresar el Señor Jesús.
Sin embargo, la Biblia enseña otra cosa muy diferente. Jesucristo mismo aseguró que Su venida sería en días como los de Noé y los de Lot.
En este sentido, es especialmente devastadora la obra de falsedad que muchos llamados ministros de Cristo están haciendo, cumpliéndose de esta manera las mismas palabras de Cristo, en cuanto a que la maldad iba a aumentar (Mateo 24:12).
Esa maldad es a veces tan sutil, que hasta parece virtud, pero es maldad. En este sentido, fijémonos en las palabras de uno de esos pequeños avatares pseudo evangélicos; Joel Osteen, y lo que enseña:
“Tú necesitas verte a ti mismo de la manera que tu desees ser, y no es suficiente el verlo, sino que necesitas aprender a decirlo” (1)
Ese mensaje falsamente evangélico, no sólo adolece de verdad en sí mismo por ser el típico del posibilismo y la metafísica moderna, sino que además se opone frontalmente a la misma enseñanza de Jesús:
“El que halla su vida, la perderá; y el que pierde su vida por causa de mí, la hallará” (Mateo 10:39).
1. Un error teológico y escatológico: el Dominionismo/El falso entendimiento acerca del Reino
A la manera de arriba de interpretar los tiempos y las sazones, así como al presunto devenir glorioso de la Iglesia en este mundo agonizante, se le llama dominionismo, y es escatología proveniente del seno de la iglesia católico romana, originándose a partir de Orígenes (siglo III) y posteriormente, y sobre todo, de Agustín de Hipona (siglo IV). No es por tanto conforme a la sana doctrina de nuestro Señor Jesucristo.
“El Dominionismo es escatología posmilenial y militante, que enseña que la única manera de que el mundo pueda ser rescatado, debe ser a través del poder temporal y terrenal previamente incautado por la Iglesia al mundo. Sólo después de que de ese modo el mundo haya sido rescatado, podría entonces regresar el Señor Jesús”.
El mismo Señor Jesucristo dijo que el reino de Dios no vendría con advertencia, y por tanto, no iba a depender de la Iglesia su establecimiento en esta tierra. Veámoslo:
“Preguntado por los fariseos, cuándo había de venir el reino de Dios, les respondió y dijo: El reino de Dios no vendrá con advertencia, ni dirán: Helo aquí, o helo allí; porque he aquí el reino de Dios está entre vosotros. Y dijo a sus discípulos: Tiempo vendrá cuando desearéis ver uno de los días del Hijo del Hombre, y no lo veréis. Y os dirán: Helo aquí, o helo allí. No vayáis, ni los sigáis. Porque como el relámpago que al fulgurar resplandece desde un extremo del cielo hasta el otro, así también será el Hijo del Hombre en su día” (Lucas 17:20-24).
En Lucas 17:20,21, Jesús les dice a los fariseos que en esos momentos el reino de Dios estaba presente de forma espiritual e invisible, y no tangible o palpable, y les advierte a sus discípulos, que iba a venir el tiempo en que Sus discípulos “desearíamos ver uno de los días del Hijo del Hombre”, y no lo veríamos (verso 22).
En ese contexto, Jesús nos advierte que se iban a levantar personajes diciendo: “Helo aquí, o helo allí…” (verso 23); es decir, algo así como: “ahora son los días de poner en orden todas las cosas en esta tierra”; sinónimo de: “Aquí está el Reino”, pero la consiguiente advertencia del Señor es: “No vayáis, ni los sigáis” (verso 23).
No obstante, desobedeciendo al Señor, sea por desconocimiento, sea por negligencia, demasiados llamados discípulos de Cristo están siguiendo a aquellos que aseguran que “Ahora es el establecimiento del Reino” en este planeta.
¡Pero el Señor Jesucristo, ya nos lo advirtió: “No vayáis, ni los sigáis”! (Lucas 17:23).
Por lo tanto, para empezar como tal, el Reino (mesiánico), tiene que ver exclusivamente con la venida del Rey:
Leer Lucas 17: 24;
“Porque como el relámpago que al fulgurar resplandece desde un extremo del cielo hasta el otro, así también será el Hijo del Hombre en su día”.
El reino sobre esta tierra será tan manifiesto como manifiesta será la venida del Señor en gloria.
Los fariseos y seguidores suyos, esperaban que con la venida del Mesías, éste iba a establecer el reino visible. Por eso no creían en Jesús, porque él no vino como rey sino como siervo.
Tremenda desilusión y tremendo desengaño es lo que algunos ya experimentan, y muchos experimentarán, todos los que son seguidores (lo sepan o no) de la “teología del Dominio”; todos los que creen que la Iglesia de alguna manera va a conquistar esta tierra, y cada nación sobre ella; algunos incluso añadiendo una carga materialista importante al asunto.
Myles Monroe
A este respecto leemos una de las declaraciones de uno de los maestros dominionistas de la actualidad; Myles Monroe:
“Abra su propio banco, abra su propia compañía de seguros, abra su propia estación de radio y de TV, abra su propio negocio, domine toda la ciudad; esta es la vida del reino. Esto no es acerca de religión, es acerca del regreso de una cultura, la cultura del reino; gracias que el reino ha llegado a Florida, en Colombia, Paraguay, etc. etc.” (2)
Este es un sumamente pervertido concepto del reino, absolutamente enfocado en lo material.
Marcos Witt
En una diabólica combinación entre el falso concepto del reino ahora, y la metafísica, Marcos Witt, el fabuloso cantante, dijo así:
“Yo le digo a mis hijos: ¡ustedes van a ser millonarios, ustedes van a ser millonarios!; y alguien me retó y me dijo: “pastor, ¿por qué dice usted esto a sus hijos, no ve que los va a llevar al materialismo, los va a poner a pensar demasiado en el dinero? Y yo le dije: ¡Ojalá!, ja, ja, ja,… ¿Cómo es que no voy a descargar eso sobre sus vidas?...Mi hijo me dijo: papá cuando yo sea millonario… ¿ven?, ¡se lo empezó a creer!, y ese es el poder de la afirmación” (3)
El “poder de la afirmación” es enseñanza metafísica; Nueva Era.
Carlos “Cash” Luna
Y como no podía ser menos, esos pequeños avatares pseudo evangélicos se permiten el lujo de pretender hacernos creer que son especiales; “ungidos” especiales que tienen experiencias especiales de parte de Dios.
En ese sentido, el tristemente célebre Carlos “Cash” Luna, describe del siguiente modo una de sus innumerables experiencias místicas en su primer y único libro hasta la fecha:
“Esa noche mi esposa y yo nos fuimos al dormitorio, y cuando estábamos acostados, cerré mis ojos intentando descansar, y comencé a sentir que me cubrían con una cobija o edredón. Pensé que era mi esposa protegiéndome del aire acondicionado. Después sentí que pusieron otra cobija y luego otra. Tanto que el peso hizo que me empezara a hundir en la cama. Entonces abrí los ojos para ver qué sucedía y con sorpresa descubrí que no había ninguna cobija sobre mí. Mi esposa y yo nos estábamos hundiendo del peso que había sobre nosotros. Giré mi rostro para ver a mi esposa, y le dije: “Sonia, es él, es él”… aquello era el peso de su poder…” (4)
Un niño se lo podría creer, pero un hombre con suficiente cabeza, no. Y sin embargo son miles y miles que creen a ese hombre, falso maestro. Opera un poder de seducción evidente en estos pequeños avatares pseudo evangélicos.
Hablando de los cristianos genuinos
Esos cristianos genuinos pero equivocados, creyendo por tanto en la obra de la Cruz, han llegado también a creer en esa espuria fe triunfalista, poniéndola al mismo nivel de la verdad revelada. El problema es que al ver que se les caen al suelo sus expectativas de conquista y dominio, se les caiga también el verdadero entendimiento de la obra de Cristo, y consecuentemente la verdadera fe.
Lo diré de otro modo: Para esos muchos, “triunfo (o conquista) de la Iglesia en esta tierra es igual a triunfo de Jesús en la Cruz”. Es decir: “Porque Cristo triunfó en la Cruz, Su Iglesia conquistará este mundo para Él”
Lo primero es verdad de Dios. Lo segundo no lo es.
No se puede ligar el triunfo de Cristo en la Cruz con una hipotética, y a todas luces falsa conquista de este mundo por parte de una Iglesia que ni siquiera ha sido todavía glorificada.
Como venimos diciendo, el problema subyacente aquí, es que cayéndose por tierra el concepto de “triunfo” y “conquista” de la Iglesia sobre este mundo, tal y como tantos y tantos creen hoy en día, del mismo modo, también se les pueda caer al suelo la verdad de la obra de verdadero triunfo de nuestro Señor en la Cruz. A eso se le llamaría, apostasía.
2. ¿La venida de Cristo sujeta a nosotros?
Muchos han llegado a creer, por boca de algunos falsos maestros dominionistas, que la venida del Señor está sujeta a nosotros, ya que antes tenemos que hacer muchas cosas para que el Señor pueda volver.
Randy Clark y su escatología errada
Hablando de falsa doctrina; Randy Clark, muy conocido internacionalmente, fundador del Apostolic Network of Global Awakening (Red apostólica del despertar global), en la declaración de fe de la Red aludida, nos asegura que ahora estamos en el tiempo del Reino sobre esta tierra, y que éste será consumado con la venida en gloria de Cristo.
Es decir, enseña que la Iglesia, a través de los “ungidos”, está transformando este mundo para que Cristo pueda volver. Hasta que este planeta no haya caído a los pies de los “ungidos” de la Iglesia como representante ésta de Cristo, Él no podrá volver para entonces dar por finalizado el Reino, ya que cree que ahora es el reino (Kingdom Now).
Véase que entonces depende de nosotros, y no del Padre la llegada del Rey.
Esa es una de las cláusulas de su declaración de fe que hay que aceptar si se quiere ser miembro de su ministerio “apostólico” internacional.
Esos “ungidos”, vocablo que se puede traducir por “cristos”, son de los que el mismo Señor habla en Mateo 24:5;
“Porque vendrán muchos en Mi Nombre, diciendo: “Yo soy el cristo; y a muchos engañarán”.
Nótese que se presentan ante los demás como cristos, es decir, ungidos, en el nombre de Cristo. Esto está ocurriendo hoy en día, sobre todo en el contexto neopentecostal. Nótese también que el Señor mismo dijo que engañarían a muchos. En este sentido, hoy en día, el mayor crecimiento numérico, viene dado por el movimiento neopentecostal y carismático.
Rick Joyner
Rick Joyner, llamado profeta internacional, miembro de la ultra católica y esotérica Orden de los Caballeros de Malta (*), y uno de los principales exponentes del neopentecostalismo/carismatismo actual, dice así acerca de los “ungidos”:
“Los verdaderos apóstoles y profetas de los últimos días, están madurando ahora y empezarán a recorrer la tierra durante los próximos años” (énfasis del autor) (5)
Esa declaración es falsa. Jesús aseguró que muchos falsos profetas se levantarían, y engañarían a muchos (Mateo 24:11), por tanto, todavía deberemos esperar un cada vez mayor nivel de engaño en medio del pueblo de Dios.
(*) “La Orden de Malta es una Orden religiosa desde 1113, año de su reconocimiento por parte del Papa Pascual II. Como Orden religiosa está ligada a la Santa Sede. Al Gran Maestre, la Iglesia [católico romana] le atribuye el rango de cardenal. Los miembros de la Orden deben vivir según los principios de la Iglesia [católico romana] y de la Orden”
3. El ecumenismo: error y blasfemia
Para entender un poco mejor el posicionamiento de Rick Joyner, así como el de cientos más de la hornada “profética” neopentecostal/dominionista internacional actual, permítanme transcribir aquí uno de sus múltiples comentarios, en este caso, acerca del papa idólatra mariano más grande que jamás haya existido. Por causa de la defunción de Juan Pablo II, escribió al respecto en su artículo “Un verdadero santo”:
“No tengo la menor duda de que Juan Pablo II fue un hombre de Dios, y que todos los cristianos deberíamos estarle agradecidos y llevar luto...Yo amaba y admiraba al papa Juan Pablo II. El fue uno de los más grandes hombres de Dios de nuestro tiempo” (6)
Con esta tarjeta de presentación, lo demás ya es más fácil de comprender...
Juan Pablo II, es decir, Karol Wojtyla, ¡es considerado el jefe romano más idólatra mariano que jamás haya existido!
La de Joyner, es una declaración que en primera instancia es un bofetón a la Reforma y a aquellos reformadores, hombres que fueron valientes para escapar del lazo opresor y maligno de Roma; ya no decir acerca del Evangelio.
El ecumenismo es clave en toda esta cuestión, y el elemento principal para el levantamiento de la última y más atroz manifestación de la Gran Ramera (Apocalipsis 13:11ss;17).
El ecumenismo, tal y como lo entendemos, es aquella propuesta aparentemente benévola de búsqueda de la unidad en lo que se denomina genéricamente Cristianismo.
Lamentablemente, esa búsqueda de la unidad está destinada al fracaso eterno, ya que – primeramente – no constituye la unidad de Dios - y en segundo lugar – compite en terrible desventaja con la verdadera unidad, cual es la del Espíritu (Efesios 4:3), la cual existe desde antes de la fundación del mundo, y será manifestada fehacientemente y a cabalidad con el encuentro de la Iglesia con el Señor en el aire (1 Tesalonicenses 4:17).
No obstante, muchos hoy por hoy son enredados y engañados por dicha propuesta de falsa unidad, la cual están manejando desde hace ya varios decenios los responsables luciferinos de la implementación de la religión mundial, precursora del advenimiento de la Bestia Anticristo.
En este sentido, leamos las palabras de uno de los portavoces de esa obra demoníaca; Benjamin Crème:
"Los trabajadores en el ámbito de la religión formularán la plataforma universal de la nueva religión mundial. Es una obra de síntesis viva y hará hincapié en la unidad y la comunión del espíritu" (7)
Esos “trabajadores del ámbito de la religión” en cuanto lo evangélico se trata, son infiltrados, falsos maestros, falsos profetas, falsos pastores, falsos evangelistas…
Billy Graham
Billy Graham es quizás el más importante de los pequeños avatares pseudo evangélicos que jamás hayan existido hasta nuestros días. Confesando de palabra ser protestante, en realidad ha sido todo lo contrario, siendo el mayor amigo del catolicismo romano que un papa romano hubiera querido encontrar (como así ha sido).
La archidiócesis católica de Portland, Oregon, se fijó una meta para suministrar 6.000 de los 10.000 consejeros necesarios para una cruzada de Graham. Todos los católicos que respondieran a la llamada del altar serían canalizados a la religión católica. Esto es sólo algún ejemplo de muchos. (8)
Graham predicó ante una audiencia mayoritariamente católica, y al frente de ésta, muchos curas, obispos y monjas, y jamás animó a esos católicos a abandonar Roma, sino todo lo contrario; les instó a quedarse en la iglesia de Roma, y ser fieles allí. Ese mensaje contradice al mensaje bíblico:
“Y oí otra voz del cielo, que decía: Salid de ella, pueblo mío, para que no seáis partícipes de sus pecados, ni recibáis parte de sus plagas; porque sus pecados han llegado hasta el cielo, y Dios se ha acordado de sus maldades” (Apocalipsis 18:4,5).
Este hombre ha sido hasta la fecha, el principal en destruir la obra de la Reforma. Ha actuado a modo de infiltrado en el seno evangélico, y todavía hoy en día millones de evangélicos profesantes, ciegamente le alaban y le tienen en un pedestal. El poder de seducción que este hombre ha tenido y sigue teniendo, es más que evidente, y no podemos sino ver un poder espiritual en ello, que no siendo el de Dios, necesariamente tendrá que ser diabólico.
Billy Graham recibió el yugo de Roma en la Universidad Católica Romana de Belmont. Esta universidad católica le concedió a Graham un Doctorado Honorífico. Graham dijo a los presentes: "El evangelio que fundó esta universidad, es el mismo evangelio que yo predico hoy”. Desde luego que sí, el suyo es un evangelio completamente adulterado, y desde luego no es el Evangelio de nuestro Señor Jesucristo.
En cuanto a esa ocasión Graham lo llamó, "un momento en que los protestantes y los católicos podían reunirse y saludarse como hermanos, mientras que hacía diez años no podía ser". (9)
¿Somos hermanos con los católicos? ¿Puede un verdadero cristiano ser hermano de alguien que no ha nacido de nuevo, y que además no puede creer que lo pueda ser, bajo caer en cometer pecado de presunción, dictado por su misma religión?
Mezclar, confundiendo, el amor a la humanidad, no importa el credo o raza, con el amor a la pureza y verdad del Evangelio, es un acto de simple demagogia. El hecho de amar a los perdidos, no va a hacer que nos unamos a ellos, llamándoles hermanos; pero eso es enseñanza de Billy Graham, lo cual todavía va más allá del simple ecumenismo formal.
De forma si cabe más explícita, Billy Graham respondiendo al prestigioso periodista David Frost, exclamó:
“…yo sentí que Dios me llamó a amar a toda la humanidad, independientemente que iglesia asista la gente, si son católicos o protestantes, o lo que sea, y trabajar con ellos, y hoy en día tenemos casi el 100% de apoyo de los católicos de este país, y esto no ocurría siquiera hace veinte años, y los Obispos, Arzobispos, el Papa son nuestros amigos… Yo me considero perteneciente a todas las iglesias, me siento en casatanto con los anglicanos, con los bautistas o con la iglesia romana…” (10)
¿Qué clase de cristiano es Graham? ¿Cómo se puede “sentir en casa” en la iglesia de Roma? Llegue usted, estimado lector a sus propias conclusiones. A las mías, ya he llegado yo.
Se siente en casa en la iglesia de Roma, como se puede sentir en casa con cualquier otro credo o religión. El exclamó así:
“Creo que el cuerpo de Cristo está formado por todos los grupos cristianos alrededor del mundo, e incluso por los grupos que no son cristianos” (11)
Veamos, ¿Cómo un cristiano y maestro como se le supone ser Billy Graham, puede decir semejante improperio? No hay manera de poder justificar esa declaración. No hay manera de poder reinterpretarla sin caer en el error.
Si el cuerpo de Cristo son todos los hombres, entonces la Iglesia ha dejado de existir como tal. ¡Gracias a Dios, Billy Graham no tiene razón!
4. Dualismo, reemplacismo: error
El escenario que presenta la escatología dominionista posmilenarista, es el de un dualismo sin parangón (**), seguramente derivado de alguna manera del Maniqueísmo.
(**) El dualismo es la creencia orientalista de la constante lucha entre el bien y el mal.
En simple clave reemplacista, Rick Joyner, añade tintes claramente dualistas en sus escritos, que demuestran una vez más la influencia del gnosticismo. En ese sentido escribe de la siguiente manera:
“Este es el conflicto final entre la luz y las tinieblas profetizado en pasajes como el de Isaías 60:1,2... Cuando vemos aquí que las tinieblas cubren la tierra y una oscuridad profunda cubre a la gente, la gloria del Señor está creciendo y apareciendo en Su pueblo. Esta aparición de Su Gloria será literal y visible, comenzando a aparecer en Su pueblo... Las naciones serán guiadas por tu luz, y los reyes, por tu amanecer esplendoroso. Alza los ojos, mira a tu alrededor: todos se reúnen y acuden a ti. Tus hijos llegan desde lejos; a tus hijas las traen en brazos. Verás esto y te pondrás radiante de alegría; vibrará tu corazón y se henchirá de gozo; porque te traerán los tesoros del mar, y te llegarán las riquezas de las naciones” (12)
Rick Joyner parafrasea los pasajes de Isaías 60:1-5, que de forma específica son para el Israel del Milenio (Apocalipsis 20), y los traslada a la Iglesia de esta dispensación actual. Craso error. Haciendo así, niega las mismas palabras de nuestro Señor Jesucristo en relación a los días de su retorno, que serían como los de Noé o los de Lot.
Confundir el papel futuro de Israel con la Iglesia, la cual está esperando el Arrebatamiento de un momento a otro; el primero (Israel) para ser salvo (Romanos 11:16) y ser exaltado sobre las naciones en el Reino Mesiánico – ver Isaías 2:1-4; Miqueas 4:1-5-, y la segunda, una vez glorificada, ser la Esposa del Cordero a Su lado para siempre (Apocalipsis 19:7,8), es el gran error que muchos están creyendo a pie juntillas.
Por ello, la espuria doctrina escatológica dominionista que enseña que los cristianos vamos a ir conquistando todas las posiciones relevantes de este mundo, cristianizando el planeta, discipulando las naciones, instaurando el Reino visible, etc. para que así Cristo pueda volver, se da absolutamente de bruces con lo que el mismo Jesucristo dijo de forma clara, diáfana, explícita, poderosa, y conforme a Su autoridad:
¡La venida del Hijo del Hombre sería en los días similares a los que fueron los días de Noé (Mateo 24:37; Lucas 17:26), y los días de Lot (Lucas 17:28-30)!
5. Refutación de la falsa teología del Dominio
El Padre hace la obra
“Jehová dijo a mi Señor: Siéntate a mi diestra, hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies” (Salmo 110:1).
El Señor no va a esperar a enviar a Su Hijo hasta que nosotros los cristianos pongamos a Sus enemigos por estrados de Sus pies (Salmo 110:1; 1 Corintios 15:24,25; Hechos 2:34), eso lo hace el Padre.
Nosotros no tomamos el control
“Y en los días de estos reyes el Dios del cielo levantará un reino que no será jamás destruido, ni será el reino dejado a otro pueblo; desmenuzará y consumirá a todos estos reinos, pero él permanecerá para siempre” (Daniel 2:44).
El Señor no va a esperar a enviar a Su Hijo hasta que nosotros los cristianos tomemos el control del poder de las naciones, sus gobiernos, y sus riquezas, eso lo hará el Hijo en Su venida gloriosa (Daniel 2:44,45; Zacarías 14; Apocalipsis 19:11ss, etc.)
El Señor no va a esperar a enviar a Su Hijo hasta que nosotros los cristianos triunfemos sobre la tierra, conquistemos y discipulemos las naciones, y seamos pastores de multitudes, porque todo eso no nos lo ha mandado.
El Hijo establecerá el Reino en Su venida
“Entonces vi el cielo abierto; y he aquí un caballo blanco, y el que lo montaba se llamaba Fiel y Verdadero, y con justicia juzga y pelea. Sus ojos eran como llama de fuego, y había en su cabeza muchas diademas; y tenía un nombre escrito que ninguno conocía sino él mismo. Estaba vestido de una ropa teñida en sangre; y su nombre es: EL VERBO DE DIOS. Y los ejércitos celestiales, vestidos de lino finísimo, blanco y limpio, le seguían en caballos blancos. De su boca sale una espada aguda, para herir con ella a las naciones, y él las regirá con vara de hierro; y él pisa el lagar del vino del furor y de la ira del Dios Todopoderoso” (Apocalipsis 19:11-15).
El Señor no va a esperar a enviar a Su Hijo hasta que nosotros los cristianos establezcamos el Reino, eso lo va a hacer el Hijo en Su venida gloriosa.
El final de esta dispensación de la gracia estará caracterizado por el aumento de la maldad
“Y por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará” (Mateo 24:12).
El Señor no va a esperar a enviar a Su Hijo hasta que se produzca el Gran Avivamiento de las Naciones. Ese avivamiento no es para esta dispensación, sino que será en el Milenio (Habacuc 2:14; Isaías 11:9 ver contexto). Otra vez, a partir de que Jesucristo regrese en gloria.
Jesús lanzó al aire una pregunta: “Cuando venga el Hijo del Hombre, ¿hallará fe en la tierra?” (Lucas 18:8), y la respuesta la encontramos en Mateo 24:37 y en Lucas 17:26; 28-30: Los días como los de Noé y como los de Lot.
Los días como los de Noé y como los de Lot en los que el Señor volverá, no son días de fe en la tierra, avivamiento y gloria, sino de mucha maldad y apostasía. Son días listos y preparados para el inminente y grandioso, así como terrible, juicio de Dios a esta humanidad que ha osado blasfemamente dar la espalda a la salvación provista por Dios en Su Hijo.
¡Pidámosle al Señor que nos de luz para escapar y salir del engaño tan atroz que se ha cernido sobre el pueblo de Dios!
“Y oí otra voz del cielo, que decía: Salid de ella, pueblo mío, para que no seáis partícipes de sus pecados, ni recibáis parte de sus plagas; porque sus pecados han llegado hasta el cielo, y Dios se ha acordado de sus maldades” (Apocalipsis 18:4,5).
Más alto se puede decir, más claro, no.
Dios les bendiga.
Sin embargo, la Biblia enseña otra cosa muy diferente. Jesucristo mismo aseguró que Su venida sería en días como los de Noé y los de Lot.
En este sentido, es especialmente devastadora la obra de falsedad que muchos llamados ministros de Cristo están haciendo, cumpliéndose de esta manera las mismas palabras de Cristo, en cuanto a que la maldad iba a aumentar (Mateo 24:12).
Esa maldad es a veces tan sutil, que hasta parece virtud, pero es maldad. En este sentido, fijémonos en las palabras de uno de esos pequeños avatares pseudo evangélicos; Joel Osteen, y lo que enseña:
“Tú necesitas verte a ti mismo de la manera que tu desees ser, y no es suficiente el verlo, sino que necesitas aprender a decirlo” (1)
Ese mensaje falsamente evangélico, no sólo adolece de verdad en sí mismo por ser el típico del posibilismo y la metafísica moderna, sino que además se opone frontalmente a la misma enseñanza de Jesús:
“El que halla su vida, la perderá; y el que pierde su vida por causa de mí, la hallará” (Mateo 10:39).
| Mi amigo el Dr. Antonio Bolainez, participó también en la misma conferencia. |
1. Un error teológico y escatológico: el Dominionismo/El falso entendimiento acerca del Reino
A la manera de arriba de interpretar los tiempos y las sazones, así como al presunto devenir glorioso de la Iglesia en este mundo agonizante, se le llama dominionismo, y es escatología proveniente del seno de la iglesia católico romana, originándose a partir de Orígenes (siglo III) y posteriormente, y sobre todo, de Agustín de Hipona (siglo IV). No es por tanto conforme a la sana doctrina de nuestro Señor Jesucristo.
“El Dominionismo es escatología posmilenial y militante, que enseña que la única manera de que el mundo pueda ser rescatado, debe ser a través del poder temporal y terrenal previamente incautado por la Iglesia al mundo. Sólo después de que de ese modo el mundo haya sido rescatado, podría entonces regresar el Señor Jesús”.
El mismo Señor Jesucristo dijo que el reino de Dios no vendría con advertencia, y por tanto, no iba a depender de la Iglesia su establecimiento en esta tierra. Veámoslo:
“Preguntado por los fariseos, cuándo había de venir el reino de Dios, les respondió y dijo: El reino de Dios no vendrá con advertencia, ni dirán: Helo aquí, o helo allí; porque he aquí el reino de Dios está entre vosotros. Y dijo a sus discípulos: Tiempo vendrá cuando desearéis ver uno de los días del Hijo del Hombre, y no lo veréis. Y os dirán: Helo aquí, o helo allí. No vayáis, ni los sigáis. Porque como el relámpago que al fulgurar resplandece desde un extremo del cielo hasta el otro, así también será el Hijo del Hombre en su día” (Lucas 17:20-24).
En Lucas 17:20,21, Jesús les dice a los fariseos que en esos momentos el reino de Dios estaba presente de forma espiritual e invisible, y no tangible o palpable, y les advierte a sus discípulos, que iba a venir el tiempo en que Sus discípulos “desearíamos ver uno de los días del Hijo del Hombre”, y no lo veríamos (verso 22).
En ese contexto, Jesús nos advierte que se iban a levantar personajes diciendo: “Helo aquí, o helo allí…” (verso 23); es decir, algo así como: “ahora son los días de poner en orden todas las cosas en esta tierra”; sinónimo de: “Aquí está el Reino”, pero la consiguiente advertencia del Señor es: “No vayáis, ni los sigáis” (verso 23).
No obstante, desobedeciendo al Señor, sea por desconocimiento, sea por negligencia, demasiados llamados discípulos de Cristo están siguiendo a aquellos que aseguran que “Ahora es el establecimiento del Reino” en este planeta.
¡Pero el Señor Jesucristo, ya nos lo advirtió: “No vayáis, ni los sigáis”! (Lucas 17:23).
Por lo tanto, para empezar como tal, el Reino (mesiánico), tiene que ver exclusivamente con la venida del Rey:
Leer Lucas 17: 24;
“Porque como el relámpago que al fulgurar resplandece desde un extremo del cielo hasta el otro, así también será el Hijo del Hombre en su día”.
El reino sobre esta tierra será tan manifiesto como manifiesta será la venida del Señor en gloria.
Los fariseos y seguidores suyos, esperaban que con la venida del Mesías, éste iba a establecer el reino visible. Por eso no creían en Jesús, porque él no vino como rey sino como siervo.
Tremenda desilusión y tremendo desengaño es lo que algunos ya experimentan, y muchos experimentarán, todos los que son seguidores (lo sepan o no) de la “teología del Dominio”; todos los que creen que la Iglesia de alguna manera va a conquistar esta tierra, y cada nación sobre ella; algunos incluso añadiendo una carga materialista importante al asunto.
Myles Monroe
A este respecto leemos una de las declaraciones de uno de los maestros dominionistas de la actualidad; Myles Monroe:
“Abra su propio banco, abra su propia compañía de seguros, abra su propia estación de radio y de TV, abra su propio negocio, domine toda la ciudad; esta es la vida del reino. Esto no es acerca de religión, es acerca del regreso de una cultura, la cultura del reino; gracias que el reino ha llegado a Florida, en Colombia, Paraguay, etc. etc.” (2)
Este es un sumamente pervertido concepto del reino, absolutamente enfocado en lo material.
Marcos Witt
En una diabólica combinación entre el falso concepto del reino ahora, y la metafísica, Marcos Witt, el fabuloso cantante, dijo así:
“Yo le digo a mis hijos: ¡ustedes van a ser millonarios, ustedes van a ser millonarios!; y alguien me retó y me dijo: “pastor, ¿por qué dice usted esto a sus hijos, no ve que los va a llevar al materialismo, los va a poner a pensar demasiado en el dinero? Y yo le dije: ¡Ojalá!, ja, ja, ja,… ¿Cómo es que no voy a descargar eso sobre sus vidas?...Mi hijo me dijo: papá cuando yo sea millonario… ¿ven?, ¡se lo empezó a creer!, y ese es el poder de la afirmación” (3)
El “poder de la afirmación” es enseñanza metafísica; Nueva Era.
Carlos “Cash” Luna
Y como no podía ser menos, esos pequeños avatares pseudo evangélicos se permiten el lujo de pretender hacernos creer que son especiales; “ungidos” especiales que tienen experiencias especiales de parte de Dios.
En ese sentido, el tristemente célebre Carlos “Cash” Luna, describe del siguiente modo una de sus innumerables experiencias místicas en su primer y único libro hasta la fecha:
“Esa noche mi esposa y yo nos fuimos al dormitorio, y cuando estábamos acostados, cerré mis ojos intentando descansar, y comencé a sentir que me cubrían con una cobija o edredón. Pensé que era mi esposa protegiéndome del aire acondicionado. Después sentí que pusieron otra cobija y luego otra. Tanto que el peso hizo que me empezara a hundir en la cama. Entonces abrí los ojos para ver qué sucedía y con sorpresa descubrí que no había ninguna cobija sobre mí. Mi esposa y yo nos estábamos hundiendo del peso que había sobre nosotros. Giré mi rostro para ver a mi esposa, y le dije: “Sonia, es él, es él”… aquello era el peso de su poder…” (4)
Un niño se lo podría creer, pero un hombre con suficiente cabeza, no. Y sin embargo son miles y miles que creen a ese hombre, falso maestro. Opera un poder de seducción evidente en estos pequeños avatares pseudo evangélicos.
Hablando de los cristianos genuinos
Esos cristianos genuinos pero equivocados, creyendo por tanto en la obra de la Cruz, han llegado también a creer en esa espuria fe triunfalista, poniéndola al mismo nivel de la verdad revelada. El problema es que al ver que se les caen al suelo sus expectativas de conquista y dominio, se les caiga también el verdadero entendimiento de la obra de Cristo, y consecuentemente la verdadera fe.
Lo diré de otro modo: Para esos muchos, “triunfo (o conquista) de la Iglesia en esta tierra es igual a triunfo de Jesús en la Cruz”. Es decir: “Porque Cristo triunfó en la Cruz, Su Iglesia conquistará este mundo para Él”
Lo primero es verdad de Dios. Lo segundo no lo es.
No se puede ligar el triunfo de Cristo en la Cruz con una hipotética, y a todas luces falsa conquista de este mundo por parte de una Iglesia que ni siquiera ha sido todavía glorificada.
Como venimos diciendo, el problema subyacente aquí, es que cayéndose por tierra el concepto de “triunfo” y “conquista” de la Iglesia sobre este mundo, tal y como tantos y tantos creen hoy en día, del mismo modo, también se les pueda caer al suelo la verdad de la obra de verdadero triunfo de nuestro Señor en la Cruz. A eso se le llamaría, apostasía.
| Portada del libro de Luna. |
2. ¿La venida de Cristo sujeta a nosotros?
Muchos han llegado a creer, por boca de algunos falsos maestros dominionistas, que la venida del Señor está sujeta a nosotros, ya que antes tenemos que hacer muchas cosas para que el Señor pueda volver.
Randy Clark y su escatología errada
Hablando de falsa doctrina; Randy Clark, muy conocido internacionalmente, fundador del Apostolic Network of Global Awakening (Red apostólica del despertar global), en la declaración de fe de la Red aludida, nos asegura que ahora estamos en el tiempo del Reino sobre esta tierra, y que éste será consumado con la venida en gloria de Cristo.
Es decir, enseña que la Iglesia, a través de los “ungidos”, está transformando este mundo para que Cristo pueda volver. Hasta que este planeta no haya caído a los pies de los “ungidos” de la Iglesia como representante ésta de Cristo, Él no podrá volver para entonces dar por finalizado el Reino, ya que cree que ahora es el reino (Kingdom Now).
Véase que entonces depende de nosotros, y no del Padre la llegada del Rey.
Esa es una de las cláusulas de su declaración de fe que hay que aceptar si se quiere ser miembro de su ministerio “apostólico” internacional.
Esos “ungidos”, vocablo que se puede traducir por “cristos”, son de los que el mismo Señor habla en Mateo 24:5;
“Porque vendrán muchos en Mi Nombre, diciendo: “Yo soy el cristo; y a muchos engañarán”.
Nótese que se presentan ante los demás como cristos, es decir, ungidos, en el nombre de Cristo. Esto está ocurriendo hoy en día, sobre todo en el contexto neopentecostal. Nótese también que el Señor mismo dijo que engañarían a muchos. En este sentido, hoy en día, el mayor crecimiento numérico, viene dado por el movimiento neopentecostal y carismático.
Rick Joyner
Rick Joyner, llamado profeta internacional, miembro de la ultra católica y esotérica Orden de los Caballeros de Malta (*), y uno de los principales exponentes del neopentecostalismo/carismatismo actual, dice así acerca de los “ungidos”:
“Los verdaderos apóstoles y profetas de los últimos días, están madurando ahora y empezarán a recorrer la tierra durante los próximos años” (énfasis del autor) (5)
Esa declaración es falsa. Jesús aseguró que muchos falsos profetas se levantarían, y engañarían a muchos (Mateo 24:11), por tanto, todavía deberemos esperar un cada vez mayor nivel de engaño en medio del pueblo de Dios.
(*) “La Orden de Malta es una Orden religiosa desde 1113, año de su reconocimiento por parte del Papa Pascual II. Como Orden religiosa está ligada a la Santa Sede. Al Gran Maestre, la Iglesia [católico romana] le atribuye el rango de cardenal. Los miembros de la Orden deben vivir según los principios de la Iglesia [católico romana] y de la Orden”
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| Rick Joyner. |
3. El ecumenismo: error y blasfemia
Para entender un poco mejor el posicionamiento de Rick Joyner, así como el de cientos más de la hornada “profética” neopentecostal/dominionista internacional actual, permítanme transcribir aquí uno de sus múltiples comentarios, en este caso, acerca del papa idólatra mariano más grande que jamás haya existido. Por causa de la defunción de Juan Pablo II, escribió al respecto en su artículo “Un verdadero santo”:
“No tengo la menor duda de que Juan Pablo II fue un hombre de Dios, y que todos los cristianos deberíamos estarle agradecidos y llevar luto...Yo amaba y admiraba al papa Juan Pablo II. El fue uno de los más grandes hombres de Dios de nuestro tiempo” (6)
Con esta tarjeta de presentación, lo demás ya es más fácil de comprender...
Juan Pablo II, es decir, Karol Wojtyla, ¡es considerado el jefe romano más idólatra mariano que jamás haya existido!
La de Joyner, es una declaración que en primera instancia es un bofetón a la Reforma y a aquellos reformadores, hombres que fueron valientes para escapar del lazo opresor y maligno de Roma; ya no decir acerca del Evangelio.
El ecumenismo es clave en toda esta cuestión, y el elemento principal para el levantamiento de la última y más atroz manifestación de la Gran Ramera (Apocalipsis 13:11ss;17).
El ecumenismo, tal y como lo entendemos, es aquella propuesta aparentemente benévola de búsqueda de la unidad en lo que se denomina genéricamente Cristianismo.
Lamentablemente, esa búsqueda de la unidad está destinada al fracaso eterno, ya que – primeramente – no constituye la unidad de Dios - y en segundo lugar – compite en terrible desventaja con la verdadera unidad, cual es la del Espíritu (Efesios 4:3), la cual existe desde antes de la fundación del mundo, y será manifestada fehacientemente y a cabalidad con el encuentro de la Iglesia con el Señor en el aire (1 Tesalonicenses 4:17).
No obstante, muchos hoy por hoy son enredados y engañados por dicha propuesta de falsa unidad, la cual están manejando desde hace ya varios decenios los responsables luciferinos de la implementación de la religión mundial, precursora del advenimiento de la Bestia Anticristo.
En este sentido, leamos las palabras de uno de los portavoces de esa obra demoníaca; Benjamin Crème:
"Los trabajadores en el ámbito de la religión formularán la plataforma universal de la nueva religión mundial. Es una obra de síntesis viva y hará hincapié en la unidad y la comunión del espíritu" (7)
Esos “trabajadores del ámbito de la religión” en cuanto lo evangélico se trata, son infiltrados, falsos maestros, falsos profetas, falsos pastores, falsos evangelistas…
Billy Graham
Billy Graham es quizás el más importante de los pequeños avatares pseudo evangélicos que jamás hayan existido hasta nuestros días. Confesando de palabra ser protestante, en realidad ha sido todo lo contrario, siendo el mayor amigo del catolicismo romano que un papa romano hubiera querido encontrar (como así ha sido).
La archidiócesis católica de Portland, Oregon, se fijó una meta para suministrar 6.000 de los 10.000 consejeros necesarios para una cruzada de Graham. Todos los católicos que respondieran a la llamada del altar serían canalizados a la religión católica. Esto es sólo algún ejemplo de muchos. (8)
Graham predicó ante una audiencia mayoritariamente católica, y al frente de ésta, muchos curas, obispos y monjas, y jamás animó a esos católicos a abandonar Roma, sino todo lo contrario; les instó a quedarse en la iglesia de Roma, y ser fieles allí. Ese mensaje contradice al mensaje bíblico:
“Y oí otra voz del cielo, que decía: Salid de ella, pueblo mío, para que no seáis partícipes de sus pecados, ni recibáis parte de sus plagas; porque sus pecados han llegado hasta el cielo, y Dios se ha acordado de sus maldades” (Apocalipsis 18:4,5).
Este hombre ha sido hasta la fecha, el principal en destruir la obra de la Reforma. Ha actuado a modo de infiltrado en el seno evangélico, y todavía hoy en día millones de evangélicos profesantes, ciegamente le alaban y le tienen en un pedestal. El poder de seducción que este hombre ha tenido y sigue teniendo, es más que evidente, y no podemos sino ver un poder espiritual en ello, que no siendo el de Dios, necesariamente tendrá que ser diabólico.
Billy Graham recibió el yugo de Roma en la Universidad Católica Romana de Belmont. Esta universidad católica le concedió a Graham un Doctorado Honorífico. Graham dijo a los presentes: "El evangelio que fundó esta universidad, es el mismo evangelio que yo predico hoy”. Desde luego que sí, el suyo es un evangelio completamente adulterado, y desde luego no es el Evangelio de nuestro Señor Jesucristo.
En cuanto a esa ocasión Graham lo llamó, "un momento en que los protestantes y los católicos podían reunirse y saludarse como hermanos, mientras que hacía diez años no podía ser". (9)
¿Somos hermanos con los católicos? ¿Puede un verdadero cristiano ser hermano de alguien que no ha nacido de nuevo, y que además no puede creer que lo pueda ser, bajo caer en cometer pecado de presunción, dictado por su misma religión?
Mezclar, confundiendo, el amor a la humanidad, no importa el credo o raza, con el amor a la pureza y verdad del Evangelio, es un acto de simple demagogia. El hecho de amar a los perdidos, no va a hacer que nos unamos a ellos, llamándoles hermanos; pero eso es enseñanza de Billy Graham, lo cual todavía va más allá del simple ecumenismo formal.
De forma si cabe más explícita, Billy Graham respondiendo al prestigioso periodista David Frost, exclamó:
“…yo sentí que Dios me llamó a amar a toda la humanidad, independientemente que iglesia asista la gente, si son católicos o protestantes, o lo que sea, y trabajar con ellos, y hoy en día tenemos casi el 100% de apoyo de los católicos de este país, y esto no ocurría siquiera hace veinte años, y los Obispos, Arzobispos, el Papa son nuestros amigos… Yo me considero perteneciente a todas las iglesias, me siento en casatanto con los anglicanos, con los bautistas o con la iglesia romana…” (10)
¿Qué clase de cristiano es Graham? ¿Cómo se puede “sentir en casa” en la iglesia de Roma? Llegue usted, estimado lector a sus propias conclusiones. A las mías, ya he llegado yo.
Se siente en casa en la iglesia de Roma, como se puede sentir en casa con cualquier otro credo o religión. El exclamó así:
“Creo que el cuerpo de Cristo está formado por todos los grupos cristianos alrededor del mundo, e incluso por los grupos que no son cristianos” (11)
Veamos, ¿Cómo un cristiano y maestro como se le supone ser Billy Graham, puede decir semejante improperio? No hay manera de poder justificar esa declaración. No hay manera de poder reinterpretarla sin caer en el error.
Si el cuerpo de Cristo son todos los hombres, entonces la Iglesia ha dejado de existir como tal. ¡Gracias a Dios, Billy Graham no tiene razón!
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| El ecumenismo es en el mejor de los casos, manifestación de la ingenuidad de ignorantes. |
4. Dualismo, reemplacismo: error
El escenario que presenta la escatología dominionista posmilenarista, es el de un dualismo sin parangón (**), seguramente derivado de alguna manera del Maniqueísmo.
(**) El dualismo es la creencia orientalista de la constante lucha entre el bien y el mal.
En simple clave reemplacista, Rick Joyner, añade tintes claramente dualistas en sus escritos, que demuestran una vez más la influencia del gnosticismo. En ese sentido escribe de la siguiente manera:
“Este es el conflicto final entre la luz y las tinieblas profetizado en pasajes como el de Isaías 60:1,2... Cuando vemos aquí que las tinieblas cubren la tierra y una oscuridad profunda cubre a la gente, la gloria del Señor está creciendo y apareciendo en Su pueblo. Esta aparición de Su Gloria será literal y visible, comenzando a aparecer en Su pueblo... Las naciones serán guiadas por tu luz, y los reyes, por tu amanecer esplendoroso. Alza los ojos, mira a tu alrededor: todos se reúnen y acuden a ti. Tus hijos llegan desde lejos; a tus hijas las traen en brazos. Verás esto y te pondrás radiante de alegría; vibrará tu corazón y se henchirá de gozo; porque te traerán los tesoros del mar, y te llegarán las riquezas de las naciones” (12)
Rick Joyner parafrasea los pasajes de Isaías 60:1-5, que de forma específica son para el Israel del Milenio (Apocalipsis 20), y los traslada a la Iglesia de esta dispensación actual. Craso error. Haciendo así, niega las mismas palabras de nuestro Señor Jesucristo en relación a los días de su retorno, que serían como los de Noé o los de Lot.
Confundir el papel futuro de Israel con la Iglesia, la cual está esperando el Arrebatamiento de un momento a otro; el primero (Israel) para ser salvo (Romanos 11:16) y ser exaltado sobre las naciones en el Reino Mesiánico – ver Isaías 2:1-4; Miqueas 4:1-5-, y la segunda, una vez glorificada, ser la Esposa del Cordero a Su lado para siempre (Apocalipsis 19:7,8), es el gran error que muchos están creyendo a pie juntillas.
Por ello, la espuria doctrina escatológica dominionista que enseña que los cristianos vamos a ir conquistando todas las posiciones relevantes de este mundo, cristianizando el planeta, discipulando las naciones, instaurando el Reino visible, etc. para que así Cristo pueda volver, se da absolutamente de bruces con lo que el mismo Jesucristo dijo de forma clara, diáfana, explícita, poderosa, y conforme a Su autoridad:
¡La venida del Hijo del Hombre sería en los días similares a los que fueron los días de Noé (Mateo 24:37; Lucas 17:26), y los días de Lot (Lucas 17:28-30)!
5. Refutación de la falsa teología del Dominio
El Padre hace la obra
“Jehová dijo a mi Señor: Siéntate a mi diestra, hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies” (Salmo 110:1).
El Señor no va a esperar a enviar a Su Hijo hasta que nosotros los cristianos pongamos a Sus enemigos por estrados de Sus pies (Salmo 110:1; 1 Corintios 15:24,25; Hechos 2:34), eso lo hace el Padre.
Nosotros no tomamos el control
“Y en los días de estos reyes el Dios del cielo levantará un reino que no será jamás destruido, ni será el reino dejado a otro pueblo; desmenuzará y consumirá a todos estos reinos, pero él permanecerá para siempre” (Daniel 2:44).
El Señor no va a esperar a enviar a Su Hijo hasta que nosotros los cristianos tomemos el control del poder de las naciones, sus gobiernos, y sus riquezas, eso lo hará el Hijo en Su venida gloriosa (Daniel 2:44,45; Zacarías 14; Apocalipsis 19:11ss, etc.)
El Señor no va a esperar a enviar a Su Hijo hasta que nosotros los cristianos triunfemos sobre la tierra, conquistemos y discipulemos las naciones, y seamos pastores de multitudes, porque todo eso no nos lo ha mandado.
El Hijo establecerá el Reino en Su venida
“Entonces vi el cielo abierto; y he aquí un caballo blanco, y el que lo montaba se llamaba Fiel y Verdadero, y con justicia juzga y pelea. Sus ojos eran como llama de fuego, y había en su cabeza muchas diademas; y tenía un nombre escrito que ninguno conocía sino él mismo. Estaba vestido de una ropa teñida en sangre; y su nombre es: EL VERBO DE DIOS. Y los ejércitos celestiales, vestidos de lino finísimo, blanco y limpio, le seguían en caballos blancos. De su boca sale una espada aguda, para herir con ella a las naciones, y él las regirá con vara de hierro; y él pisa el lagar del vino del furor y de la ira del Dios Todopoderoso” (Apocalipsis 19:11-15).
El Señor no va a esperar a enviar a Su Hijo hasta que nosotros los cristianos establezcamos el Reino, eso lo va a hacer el Hijo en Su venida gloriosa.
El final de esta dispensación de la gracia estará caracterizado por el aumento de la maldad
“Y por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará” (Mateo 24:12).
El Señor no va a esperar a enviar a Su Hijo hasta que se produzca el Gran Avivamiento de las Naciones. Ese avivamiento no es para esta dispensación, sino que será en el Milenio (Habacuc 2:14; Isaías 11:9 ver contexto). Otra vez, a partir de que Jesucristo regrese en gloria.
Jesús lanzó al aire una pregunta: “Cuando venga el Hijo del Hombre, ¿hallará fe en la tierra?” (Lucas 18:8), y la respuesta la encontramos en Mateo 24:37 y en Lucas 17:26; 28-30: Los días como los de Noé y como los de Lot.
Los días como los de Noé y como los de Lot en los que el Señor volverá, no son días de fe en la tierra, avivamiento y gloria, sino de mucha maldad y apostasía. Son días listos y preparados para el inminente y grandioso, así como terrible, juicio de Dios a esta humanidad que ha osado blasfemamente dar la espalda a la salvación provista por Dios en Su Hijo.
¡Pidámosle al Señor que nos de luz para escapar y salir del engaño tan atroz que se ha cernido sobre el pueblo de Dios!
“Y oí otra voz del cielo, que decía: Salid de ella, pueblo mío, para que no seáis partícipes de sus pecados, ni recibáis parte de sus plagas; porque sus pecados han llegado hasta el cielo, y Dios se ha acordado de sus maldades” (Apocalipsis 18:4,5).
Más alto se puede decir, más claro, no.
Dios les bendiga.
© Miguel Rosell Carrillo, pastor de Centro Rey, Madrid, España. Mayo 2011
Notas y citas:
1. Joel Osteen, frases de su discurso en “The Night of Hope”, ante más de 5.000 personas en el Wembley Arena en Londres el 6 de julio de 2007
2. “Redescubriendo el reino” Myles Munroe http://vimeo.com/10673292
3. Marcos Witt; www.youtube.com/watch?v=em5NbDHLSTw
4. Carlos Luna, “En honor al E.S.” P. 17
5. Rick Joyner, “La Iglesia debe valorar su oportunidad”; www.ccnven.org/guia.htm
6. Rick Joyner; Special Bulletin #3 - 2005: A True Saint (Un verdadero santo); www.morningstarministries.org/feature/sb/index.htm
7. Benjamin Crème; “Reaparición del Cristo” pp. 168-169
8. Billy Graham. www.jesus-is-lord.com/billy.htm
9. Belmont Abbey Confers Honorary Degree," Paul Smith, Gazette staff reporter, The Gastonia Gazette, Gastonia, North Carolina, Nov. 22, 1967
10. Billy Graham con David Frost; www.youtube.com/watch?v=QWBkEyFsyHs&NR=1
11. Billy Graham con Robert Schuller www.youtube.com/watch?v=QWBkEyFsyHs 12. Rick Joyner, “La Iglesia debe valorar su oportunidad”; www.ccnven.org/guia.htm
* El pastor Miguel Rosell Carrillo pastorea la Iglesia Evangélica "Centro Rey Jesucristo" (pentecostal) en Madrid, España. Es un asiduo estudioso de las Sagradas Escrituras, destacándose últimamente por sus variados artículos apologéticos y escatológicos. En dichos artículos hace defiende la fe bíblica frente a la Apostasía causada por los movimientos heréticos infiltrados en la Iglesia Cristiana Evangélica como el Movimiento G12, la Teología del Reino Presente o Teología del Dominio, la Nueva Reforma Apostólica, etc.
Sitio Web de la Iglesia "Centro Rey Jesucristo" (Pr. Miguel Rosell):
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