El caso de Kenneth Bae ha sido noticia en EE.UU y el mundo. |
WASHINGTON, Estados Unidos (Christianity Today / Protestante Digital) La “propaganda” de la que Corea del Norte acusaba a Kenneth Bae para condenarlo a ocho años de trabajo forzado es, probablemente, la predicación del evangelio. Según informa el Wall Street Journal, el gobierno norteamericano ha tenido confirmación de que Bae participaba en la obra misionera cristiana, lo cual está prohibido por el régimen de Pyonyang.
Desde Estados Unidos se pidió a Corea del Norte más información acerca de la detención de Kenneth Bae, cuyo juicio fue considerado como “poco transparente” por la Casa Blanca. Según algunas fuentes cercanas al departamento de Estado - citadas por Christianity Today - Bae habría estado trabajando en secreto para la organización Juventud con Una Misión (JUCUM), una organización misionera internacional que trabaja en la plantación de iglesias en diversos escenarios.
Según el Global Post, a Bae se le acusa de “predicar en contra del gobierno de Corea del Norte en iglesias de Corea del Sur y de América, y de crear planes de contrabando de materiales hacia Corea del Norte, y de haber ayudado a al menos 250 de sus seguidores a inmiscuirse en el territorio comunista bajo el disfraz de turistas, produciendo además propaganda contra Corea del Norte”.
Desde el el gobierno de Estados Unidos se han expresado en más de una ocasión a favor de la liberación de Bae. Un sorprendente aliado podría ser el ex jugador de baloncesto Dennis Rodman, que estuvo en Corea del Norte a finales de abril y escribió en un tuit que “preguntaría a 'Kim' – en referencia al líder del país - por las razones claras de la detención de Bae”.
Noticias Relacionadas:
03/05/13 - Corea del Norte sentencia a un cristiano a 15 años de trabajo forzado
30/04/13 - Cristiano detenido en Corea del Norte podría enfrentar pena de muerte
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios deben ser de acuerdo al tema de la noticia o artículo. Comentarios fuera del tema o agraviantes no serán publicadas. Escribir todo en mayúsculas se considera como gritar y además, dificulta la lectura.