NUEVA YORK, Estados Unidos (Mission Networl News / Mundo Cristiano) Los eventos del 11-S (9/11) redefinieron la siguiente década para los Estados Unidos y Europa. Los grupos cristianos que trabajan en un contexto global se ajustaron a través del cuerpo de la iglesia local.
Bas Vanderzalm de Medical Teams International (Equipos Médicos Internacional) señala que, en ese día, las iglesias locales se convirtieron en centros de esperanza. Sin embargo: "Las iglesias necesitaban ayuda. No tenían necesariamente la experiencia para saber qué hacer, ni tenían los recursos que necesitaban para responder, y ahí es donde nos asociamos con ellas".
El 11-S nos demostró nuestra vulnerabilidad y ayudó a moldear nuestro evangelismo en el futuro. Vanderzalm agrega: "Nuestra misión es demostrar el amor de Cristo a las personas afectadas por el desastre, el conflicto y la pobreza alrededor del mundo, y lo mejor que podemos hacer es apoyar a las iglesias locales que están en el campo. Ellos saben quién necesita ayuda, ellos han estado ahí todo el tiempo. Ellos estarán ahí mucho tiempo después de que nos vayamos".
LECCIONES APRENDIDAS DEL 11-S
La ignorancia de la iglesia estadounidense sobre el sufrimiento fue arrasada con el choque de cuatro aviones en 11 de septiembre del 2001.
Carl Moeller, el presidente y director ejecutivo de Open Doors (Puertas Abiertas) en Estados Unidos, comenta: "Antes del 11 de septiembre del 2001, éramos felizmente ignorantes sobre el odio que se fraguaba en las mentes extremistas de los terroristas alrededor del mundo. Desde ese momento, ya no podíamos darnos el lujo de tener esa ignorancia. Y la realidad es que una de las cosas sobre las que hemos permanecido tercamente ignorantes es sobre el hecho de que hay cristianos en muchos países y los escuchamos en las noticias todos los días que enfrentan una tormenta de persecución".
Desde los ataques del 11-S, los creyentes estadounidenses no tienen excusa para no ser solidarios con aquellos que enfrentan ataques directos a diario. Open Doors invita a todos los creyentes a unirse en oración por los cristianos que a diario reemplazan el odio con el amor de Cristo.
DESPUÉS DE 10 AÑOS, AÚN HAY ESPERANZA
Los ataques terroristas del 11 de septiembre del 2001 en los Estados Unidos provocaron temor y dolor. Pero el evangelista Sammy Tippit asegura que el 11-S también trajo esperanza para el avivamiento: "Cuando golpea la tragedia, creo que el primer lugar natural al que todos miramos es hacia arriba. Comenzamos a buscar a Dios, y creo que eso es lo que ocurrió. Hubo un potencial para el avivamiento en la nación en ese tiempo, sin embargo, cuando las cosas se calmaron, simplemente volvimos a nuestros negocios cotidianos y a la vida común".
Además de algún movimiento en la ciudad de Nueva York, no se vio ningún avivamiento. De hecho, el grupo Barna reportó que la asistencia a la iglesia en general ha declinado. Sin embargo, en este punto, 10 años después, hay esperanza nuevamente.
"Creo que este es un momento crítico. Han pasado 10 años. Económicamente, las cosas están en un punto muy bajo. Y la nación yace en una modalidad de crisis. Creo que si reflexionamos en lo que ocurrió en ese entonces y el potencial que había para un gran mover del Espíritu de Dios, en el punto en que estamos ahora, si realizamos algunas acciones concretas y algunos planes muy definidos para en verdad movilizar a la gente en este momento, podríamos ver un gran mover del Espíritu de Dios".
Noticias Relacionadas:
08/09/11 - EEUU: Un llamado de atención al Pueblo de Dios ante el 10º aniversario del 11-S
08/09/11 - EEUU: Evangélicos relegados en el programa de la ceremonia del 11-S
14/09/10 - EEUU recuerda el 11-S con manifestaciones en pro y contra de la mezquita en Zona Cero
13/09/10 - Cristianos oran por un reavivamiento espiritual de EEUU en aniversario del 11-S
08/09/10 - Parlamento Mundial de Religiones pide solidaridad y tolerancia en aniversario de 11-S
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios deben ser de acuerdo al tema de la noticia o artículo. Comentarios fuera del tema o agraviantes no serán publicadas. Escribir todo en mayúsculas se considera como gritar y además, dificulta la lectura.