LONDRES, Reino Unido (The Telegraph / Acontecer Cristiano) Según han revelado los medios de comunicación del Reino Unido, la policía investiga el artículo de la revista de los Testigos de Jehová donde se hace mención a unos “enfermos mentales”. En el diario The Telegraph se ha publicado que una revista oficial de los testigos de Jehová califica a aquellos que abandonan su confesión religiosa de “enfermos mentales”, y recientemente ha trascendido que es objeto de investigación policial.
Los inspectores están comprobando si el artículo, que corresponde a la edición del mes de julio de la revista "La Atalaya" ("The Watchtower"), supone una infracción a la legislación británica que vela por la ausencia del odio religioso. El artículo, publicado en la revista que es distribuida por los Testigos de Jehová por todo el mundo, advierte a los miembros de la confesión religiosa para que eviten a los “falsos maestros”, a los que se les califica despectivamente de “enfermos mentales”.
“Suponga que un médico le dice a usted que evite todo contacto con alguien porque tiene una enfermedad mortal muy contagiosa”, menciona parte del artículo. “Usted sabría qué es lo que el médico le ha querido decir, y seguiría estrictamente la advertencia. Bien, los apóstatas están “mentalmente enfermos", y pretenden infectar a otros con sus enseñanzas desleales”.
Un grupo de ex-Testigos, de la localidad de Portsmouth, ha presentado un querella sobre este artículo en la comisaría de Hampshire. La policía a iniciado una investigación. Están evaluando si lo denuncian ante la Charity Comission. La Watchtower Bible and Tract Society of Britain, que imprime las publicaciones en Gran Bretaña, está inscrita como una entidad benéfica ante esta comisión. La confesión religiosa es conocida por el trato duro que da a los miembros que critican las doctrinas y sacan a relucir dudas sobre la fe.
Angus Robertson, un ex-anciano -pastor religioso local- Testigo, de la localidad de Hampshire, quien estuvo presente en la reunión con la policía, dijo a The Independent: “Esta directriz religiosa que se utiliza para intimidar a la gente, debe ser desafiada. Si una religión predicase que los negros o los homosexuales están mentalmente enfermos, sería un escándalo”.
Pero Rick Fenton, un portavoz de la confesión religiosa, defiende esos pasajes bíblicos, diciendo que el hacerles el vacío “es un asunto personal que cada cual decide por sí mismo. Todo Testigo de Jehová es muy libre de expresar sus sentimientos y formular las preguntas que desee. Si una persona cambia el concepto sobre estas enseñanzas bíblicas que una vez atesoró, nosotros reconoces su derecho a que nos abandone”.
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| "La Atalaya" ("The Watchtower"), es la revista oficial de los Testigos de Jehová. |
UNA BATALLA DIALÉCTICA
En el artículo citado anteriormente, y que ha firmado Jerome Taylor en el diario The Independent, se informa de que la revista oficial de los Testigos de Jehová ha descrito a los que abandonan la secta como personas “mentalmente enfermas”, lo cual ha provocado la protesta de ex-miembros y miembros de la organización preocupados por el rechazo hacia aquéllos que cuestionan la doctrina oficial de ésta.
Una copia de la revista, que es distribuida por los Testigos de Jehová en todo el mundo, fue entregada a The Independent por un miembro actual de la secta que está descontento con la doctrina oficial pero que teme abandonarla por miedo a perder su familia. “Muchos como yo siguen asociados con los Testigos por temor a ser descubiertos como “apóstatas” y separados, no sólo de la organización, sino de sus propios familiares y amigos”, dijo este hombre, que sólo daba su nombre (John). “Ahora me encuentro etiquetado como alguien ‘mentalmente enfermo’, lo cual otorga a cualquiera que descubra mis verdaderas creencias plena libertad para tratarme con desprecio”.
Como religión con una directiva centralizada, se usan muchas formas de disciplina para contrarrestar la crítica doctrinal, que van desde la restricción de responsabilidades oficiales hasta la expulsión. Los que han sido expulsados de la secta se encuentran a menudo aislados por sus compañeros de creencia.
Un creciente número de ex-Testigos y de Testigos ha comenzado a sostener que el uso por parte de la secta del término “mentalmente enfermo” para describir a los desertores, podría infringir las leyes de odio religioso de Gran Bretaña. Un grupo de ex-Testigos de Portsmouth ha elevado ya una protesta a la policía de Hampshire por el artículo, y la policía está actualmente investigando.
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